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Llanes se inhibió luego de que el abogado querellante Rafael Fernández, representante de la Cajubi, le recusara por supuesto “odio y resentimiento”.
El profesional indicó que la misma tuvo una actuación “sospechosa, interesada y parcialista” porque concedió arresto domiciliario al exsíndico –que solo estuvo preso durante 4 meses– primero por 30 días, y luego le dio una prórroga de 30 días más “de oficio”.
Tras la inhibición de Llanes, de manera sospechosa, el expediente tardó más de 24 horas en ser remitido a la jueza de ejecución Yolanda Morel, quien le sigue en el orden de turno. Respecto al regreso a la cárcel de Mengual hay dos posturas. La primera es que la jueza Morel debe ordenar por resolución su vuelta a Tacumbú, y la otra es que con el plazo de arresto domiciliario cumplido, el condenado tiene que presentarse a la cárcel, sobre todo si pretende obtener en breve su libertad condicional.
Según averiguaciones realizadas ayer a últimas horas de la tarde, Mengual aún no había retornado a Tacumbú, lugar donde cumplen sus penas los demás condenados de la Cajubi.
Las condenas más altas fueron impuestas a los expresidentes de la Caja, Víctor Bogado Núñez y Mariano Escurra, de 14 años de pena privativa de libertad.