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“Para los mequetrefes apostados en ABC y demás camaradas independientes, las palabras tales como democracia, gobierno republicano, libertad, respeto, justicia social, estado de derecho, paz, progreso, bienestar y prosperidad, suenan vacías como sus mentes, no están incluidas en su diccionario importado de Moscú vía la Habana. En sus léxicos se encuentran escritas de antemano por supuesto: subversión, terrorismo, asesinatos”, escribió Rodríguez Kennedy en la página 2 del entonces diario Patria, en su edición del viernes 30 de diciembre de 1983.
“Hablando Claro”, era el título del escrito del ahora “democrático” aspirante a la Corte, cuyo facsímil se reproduce en la parte superior derecha de esta página.
Diez años después de ese delirante escrito, Rodríguez Kennedy sumó otro antecedente antidemocrático aprovechando y utilizando su cargo de juez de primera instancia en lo civil y comercial del cuarto turno.
Fue entonces cuando el 7 de mayo de 1993, el ahora aspirante a ministro de la Corte Suprema de Paraguay prohibió la intervención de los denominados “vigilantes de la democracia”, quienes eran voluntarios preparados para controlar el buen desarrollo de los comicios generales de aquel entonces.
En una decisión, considerada inconstitucional y antidemocrática, el entonces magistrado Óscar Rodríguez Kennedy dio órdenes para evitar la labor de quienes tenían previsto dar informes sobre “boca de urna” o contar detalles de los comicios a través de una cadena de medios de comunicaciones.
Ante los reclamos posteriores, el juez que dictó aquella medida rechazó pedidos de reconsideración y otros reclamos legales que fueron planteados.