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El ataque se perpetró a las 21:00 del miércoles, por seis desconocidos de sexo masculino que se identificaron como militantes del EPP. Todos ellos portaban armas largas y cortas, además de vestir uniformes camuflados.
Conforme a los datos, los atacantes irrumpieron en el casco principal de la estancia “María Auxiliadora” o “Macchi Cue”, ubicada a unos 4,6 kilómetros de la Ruta V “Gral. Bernardino Caballero” a la altura del kilómetro 91, en la localidad de Cuero Fresco del distrito de Horqueta.
El capataz y su esposa eran las personas que se encontraban en el sitio, cuando los insurgentes rodearon el recinto y redujeron a los peones. Luego, comenzaron a inculcarles su doctrina y los tomaron de rehenes hasta las 02:00. Durante ese lapso, recorrieron todo el recinto con total tranquilidad, durante su permanencia en el lugar y se llevaron una escopeta sustraída a los peones.
Según los testigos, en todo momento actuaron sin violencia hacia los cautivos, a quienes realizaron varias preguntas.
Antes de abandonar el retiro quemaron un tractor, dos implementos agrícolas y dos construcciones de material cocido, una de ellas utilizada como vivienda y la otra como un sitio para el procesamiento de alimentos para los animales.
También efectuaron disparos hacia el lugar donde pastaban unos animales en las inmediaciones del casco principal del establecimiento. Una vaca resultó muerta como consecuencia de las balas.
Amenazas
Los miembros del EPP también encargaron a los peones que transmitan un mensaje de amenaza dirigido al director de la II Zona Policial, Crio. Gral. Insp. Antonio Gamarra.
Pidieron que le digan que deje de buscarlos por la ruta, que ellos están en los montes. También amenazaron con hacer “volar” los vehículos blindados que posee la Policía en el departamento de Concepción.
Rechazan soja y agrotóxicos
Los integrantes del EPP dejaron un comunicado en el que recuerdan la “prohibición” del cultivo de soja y el uso de agrotóxicos en la zona, el acercamiento a los montes, la deforestación y la contaminación de ríos y arroyos. “En caso de incumplimiento de estas prohibiciones y los autores sean sorprendidos por las fuerzas revolucionarias, los mismos recibirán la pena máxima (fusilamiento)”, dice la nota.