El Departamento de Identificaciones quemó 23.500 pasaportes vencidos

En la mañana de ayer, con la presencia de autoridades del Ministerio Público, se procedió a la quema en los hornos de la exfábrica de Acepar de 23.500 pasaportes que fueron solicitados en el Departamento de Identificaciones, pero que nunca fueron retirados y ya estaban vencidos.

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Como parte del resultado de una auditoría de gestión que busca la trasparencia en el Departamento de Identificaciones de la Policía Nacional, el jefe de la unidad policial, comisario Clemente Espínola, solicitó que pasaportes que ya están vencidos sean incinerados, para evitar que los documentos pasen a ser utilizados de forma irregular.

La fiscala Sonia Pereira, de la Fiscalía Barrial N° 2, acompañó a la comitiva que llevó los documentos a ser destruidos en la exfábrica de Acepar en Villa Hayes, donde se arrojaron los referidos pasaportes a los hornos.

Todos los documentos vencidos y anulados sin ningún valor legal fueron quemados en su totalidad.

“Por ahora solamente se quemaron los pasaportes que nunca se retiraron y vencieron, para evitar que los mismos sean sacados de la institución y puedan ser utilizados por delincuentes, como ya ocurrió en el pasado” señaló el comisario Clemente Espínola.

“Ahora pedimos usar los hornos de esta empresa para poder destruir la gran cantidad de pasaportes, pero en el futuro ya vamos a ir ordenando las cosas y cada tres meses todos los documentos que venzan o no sean retirados serán destruidos acá mismo en el departamento donde tenemos una máquina trituradora, que en esta ocasión no pudimos usarla por el volumen de lo que se tenía que quemar”, explicó el jefe del Departamento de Identificaciones.

El uniformado también dijo que actualmente cuentan con 50.000 cédulas vencidas y se están haciendo los trámites para su destrucción.

Espínola señaló que están tratando de poner la “casa en orden” para evitar que ocurran casos como los del narcotraficante Ibar Pérez Corradi, quien ayudado por agentes policiales logró conseguir una cédula original, pero de contenido falso y de esa forma ocultar su verdadera identidad.

También hace unos meses se descubrió una red de falsificadores que justamente utilizando pasaportes vencidos estaban sacando los documentos hacia el exterior y tras ser adulterado su contenido los vendían a extranjeros por elevadas cifras. Ahora se está tratando de hacer y entregar los documentos a tiempo.

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