Cargando...
El suboficial 1° Águedo Ronaldo Lezcano Paredes, de la sección Inteligencia de la Jefatura de Policía de Amambay, fue arrestado el 5 de marzo del año pasado en una operación de efectivos del departamento Investigación de Delitos, en el Kilómetro 23,5 de la Ruta II, en Capiatá, cuando traía desde Pedro Juan Caballero dos litros de cocaína líquida. La droga, cargada en preservativos, debía ser entregada a una mula que iba a viajar ese día a Europa.
Seis meses después del procedimiento, el 6 de setiembre de 2013, la Policía dio de baja en una reunión del Tribunal de Calificaciones al mencionado efectivo, aunque hasta hoy el presidente de la República, Horacio Cartes, todavía no firma el decreto respaldatorio.
Sin embargo, al día siguiente, el 7 de setiembre, Águedo Lezcano abandonó sorpresivamente la cárcel de Tacumbú, luego de que el fiscal que supuestamente lo investigaba, José Luis Casaccia, le otorgó un sobreseimiento provisional porque “no halló elementos de sospechas suficientes” contra el narcopolicía arrestado en flagrancia.
El ministro del Interior, Francisco de Vargas, así como los miembros de la cúpula policial, atacaron la sugestiva medida que le concedió el fiscal Casaccia al narcopolicía.
Finalmente, una investigación reveló que Casaccia accedió a liberar al suboficial después de un “acuerdo” al que llegó con el hermano del narcopolicía, el diputado Marcial Lezcano Paredes.
Este, supuestamente, le prometió respaldo político a Casaccia en caso de un eventual enjuiciamiento, que hasta ahora sigue latente, aunque sospechosamente estancado.
Casaccia fue suspendido por tres meses justamente por este caso, pero ahora está reasignado por el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, para cumplir funciones en Caacupé.
También se habló de que la libertad del policía capturado con cocaína fue financiada por la red que dirige el capomafioso brasileño Luis Carlos da Rocha, “Cabeza Branca”, uno de los narcos más buscados de Sudamérica.
De hecho, el suboficial Águedo Lezcano sigue señalado ahora que está nuevamente en libertad como cabecilla de una de las facciones de la red de “Cabeza Branca”, cuyo administrador en Paraguay es supuestamente Carlos Rubén Sánchez Garcete, “Chicharõ”, quien a su vez es diputado suplente por la ANR en la lista de Marcial Lezcano Paredes, hermano del narcopolicía liberado.
Irónicamente, “Chicharõ” fue capturado en Capitán Bado y después remitido a Tacumbú el 7 de setiembre del año pasado, el mismo día en que abandonó el penal su cómplice, el narcopolicía Águedo Lezcano, quien fue recogido del reclusorio por su hermano diputado pedrojuanino.
De momento, el legislador consiguió congelar el proceso en contra de su hermano narcopolicía, aunque la causa fue reasignada recientemente a la fiscala de Capiatá, Sofía Jiménez, quien deberá reiniciar la investigación.