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PEDRO JUAN CABALLERO (Cándido Figueredo Ruiz, de nuestra redacción regional).La intervención en la cárcel de esta ciudad fue encabezada ayer de tarde por la fiscala Katia Estela Uemura Cabañas y el juez Cándido Insfrán, así como por el jefe de Orden y Seguridad local, comisario principal Juan Fernández.
Según los datos, la comitiva requisó algunos documentos, como libro de novedades, y también verificó el pabellón donde se produjo el mortal tiroteo. Los funcionarios constataron que, llamativamente, el portón que conduce a la celda donde estaba alojado el sicario asesinado no tenía candado.
Inmediatamente después, la ministra de Justicia, Sheila Raquel Abed, firmó en Asunción la resolución por la cual dispuso la remoción del director de la cárcel de Pedro Juan Caballero, Romualdo Rojas Amarilla.
Abed incluso solicitó a la Presidencia de la República que sea desvinculado del Ministerio de Justicia.
Asimismo, se oficializó la intervención del penal y se designó como responsable al abogado Christian Rolando González Morel, según se informó en la capital.
Los pistoleros
Por otro lado, ayer cerca del mediodía comparecieron ante el Ministerio Público los dos internos que perpetraron el ataque a tiros con una pistola contra el sicario Emiliano Rojas Giménez (37) y su capanga Luis Fleitas Recalde (47), según los datos.
Se trata del brasileño Alberto Pavone Baes (26), alias “Negriño”, preso por robo y homicidio, y del paraguayo Ever Alejandro Ozuna López (22), encerrado por homicidio.
Ambos se abstuvieron de declarar, según los datos suministrados por fuentes de la fiscalía de esta ciudad.
El ataque
Emiliano Rojas Giménez y su custodio Luis Fleitas Recalde, ambos capturados por la Senad en Capitán Bado, el 21 de mayo de 2013, fueron acribillados con una pistola Bul Cheroky calibre 9 mm en un pabellón de la cárcel de Pedro Juan Caballero, el sábado de tarde.
El suceso fue materializado por los otros internos, Pavone y Ozuna. Estos, después de disparar contra sus víctimas, se parapetaron en su celda hasta que fueron reducidos.
Emiliano Rojas Giménez murió esa misma noche, en tanto que Fleitas sigue grave. El caso constituiría una “quema de archivo”.