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En los primeros minutos de la madrugada de ayer, agentes del Departamento Antinarcóticos de la Policía irrumpieron en la propiedad ubicada en el kilómetro 11 lado Monday de la capital de Alto Paraná.
Los policías manejaban el dato de que el sitio era uno de los tantos aguantaderos de la estructura criminal brasileña, Primer Comando Capital (PCC), en la zona.
La información efectivamente era correcta, en el sitio estaba montado un laboratorio para el procesamiento de la pasta base de cocaína, que los criminales traen de Bolivia y Perú.
En el lugar fueron encontrados todos los elementos y sustancias químicas para la producción del clorhidrato de cocaína y el crack, a partir de la pasta base.
En un pequeño garaje estaba estacionada una camioneta con 16 bidones repletos de acetona, también una prensa de 60 toneladas y moldes con la inscripción 007, que es una de las marcas que tienen los panes de cocaína remesadas desde nuestro país al Brasil, explicaron.
Municiones
En una de las dependencias de la propiedad también se encontraron 30 proyectiles calibre .50, 350 cartuchos 5.56, 18 municiones 7.62, a más de seis granadas de fragmentación, un silenciador para fusil y un trípode, también para fusil.
En los últimos meses, los miembros de esta red mafiosa afincados en el Alto Paraná montaron pequeños laboratorios instalados en diferentes puntos de la ciudad para el procesamiento de la droga que luego envían al Brasil, junto con las armas y municiones, señalaron.