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El detenido fue identificado como Pedro Pablo Martínez (53), domiciliado en la zona de Puerto Botánico de la capital, cuenta con cuatro antecedentes, dos intentos de homicidio, uno por tráfico de drogas y el último por violencia doméstica.
Según los investigadores, tres hijos mayores del sospechoso están recluidos actualmente en la cárcel de Tacumbú, por hechos de homicidios, mientras que su esposa, Delinda Chaparro, está presa en la cárcel de mujeres El Buen Pastor, por narcotráfico.
Alrededor de las 04:00, Martínez fue interceptado por patrulleros de la comisaría 12ª metropolitana sobre la calle Epopeya Nacional y Última, de Trinidad, tras concretar una venta a uno de los adictos de la cuadra.
En poder del maleante fueron hallados 52 gramos de crack, equivalentes a más de 500 dosis, además de 230.000 guaraníes, producto de las ventas realizadas durante la madrugada, confirmó el jefe de la comisaría 12ª metropolitana, el Crio. Princ. Jorge Caballero.
Los distribuidores obtienen diez dosis de cada gramo de crack y cada porción es comercializada a 10.000 guaraníes a los consumidores, lo que genera millonarias ganancias a las organizaciones criminales, aseguró el Crio. Princ. Caballero.
Martínez salió de la cárcel en junio del año pasado y desde ese momento conformó una verdadera organización criminal que se encarga de la distribución de crack en las zonas marginales del barrio Santísima Trinidad.
Menores de la calle y jóvenes estudiantes fueron los principales clientes de la red de traficantes desarticulada, señalaron los policías.
El consumo del crack incrementó el índice delincuencial en todo el barrio Santísima Trinidad, debido a que los adictos perpetran cualquier tipo de golpes para comprar la droga, señalaron los agentes.