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La señora Kreller de García dijo que la venganza o “vendetta” comenzó después de que ella y otras personas denunciaran graves hechos de corrupción en la administración de la Fundación Kolping, una organización que tiene sus oficinas y un complejo con talleres y aulas en la ciudad de Fernando de la Mora.
La Fundación Kolping es una organización sin fines de lucro que inició sus actividades en nuestro país en 1998 y tiene su origen en una iniciativa del sacerdote católico alemán Adolfo Kolping, a mediados del siglo XIX, en la nación germana.
La entidad que tiene escuelas para la formación de jóvenes en distintos oficios y profesiones, llegó a recibir fondos del Gobierno alemán para solventar sus programas de enseñanza y a favor de los ciudadanos de escasos recursos.
Kreller de García se desempeñaba como directora ejecutiva de la fundación, hasta que fue desvinculada de la organización después de denunciar hechos de corrupción en 2010, según contó en nuestra redacción.
Su denuncia se relacionó a multimillonarios faltantes de dinero enviado por el Gobierno alemán, situación que obligó a las autoridades germanas a suspender los envíos de fondos.
Al formular la denuncia también se solicitó una investigación, indicó.
Tras la sanción del Gobierno alemán, reemplazantes de Kreller de García buscaron la venganza, hasta que el señor Olaf von Brandenstein, actual director ejecutivo de la fundación, lo querelló por difamación y calumnia.
Luego de promoverse la demanda, la señora Kreller de García dijo que fue procesada y condenada a la velocidad de un rayo. Sostuvo que la jueza Sandra Farías la condenó a 18 años de cárcel en una sentencia que fue confirmada por el Tribunal de Apelaciones en lo Penal, Tercera Sala, en un fallo que fue objeto de una acción de recurso de casación, rechazado recientemente por la Sala Penal de la Corte.
Al señalar que tiene previsto solicitar asilo a la embajada de un país sudamericano o europeo local y acudir a tribunales internacionales para demostrar que fue objeto de una venganza por denunciar graves hechos de corrupción, la señora Kreller de García dijo que la querella en su contra se basó en el texto de un correo electrónico suyo que fue hackeado.
La denunciante afirmó que fue querellada porque en su email había escrito que el señor Brandenstein se luce en la fundación con trabajos realizados por ella.
Vinculación judicial
La jueza Sandra Farías dictó la sentencia condenatoria bajo presión del entonces ministro Víctor Núñez y similar decisión tomó el Tribunal de Apelaciones en lo Penal, 3ª Sala, sostuvo Keller de García.
Entendió que detrás de esos fallos y presiones estarían miembros denunciados por los hechos de corrupción.