Una incidentada audiencia preliminar se inició ayer en el caso en el que están procesados exdirectivos de la Caja de Jubilados de Itaipú, por lesión de confianza y estafa.
Tras ratificarse la acusación y pedido de elevación de la causa a juicio oral y público por parte del fiscal Martín Cabrera, el abogado Rodas, representante legal de los procesados Víctor Bogado Núñez, expresidente de Cajubi, y el exmiembro de la entidad Juan Félix Bautista Villamayor Gabaglio, recusó al juez penal de garantías José Agustín Delmás Aguiar.
El abogado Rodas, yerno del ministro de la Corte Víctor Núñez, recusó al juez Delmás porque supuestamente a pesar de la recusación pretendió seguir la audiencia.
Rodas también acusa que la prensa ejerce presión sobre el magistrado, lo que afecta su ánimo e imparcialidad.
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Por su parte, el juez Delmás solicitó a la Cámara de Apelaciones que rechace la recusación, ya que no existe motivo legal por parte de la defensa para pedir su apartamiento.
El querellante, representante de la Cajubi, abogado Rafael Fernández, lamentó que la Corte no sancione a los abogados que abusan del derecho para ejercer la profesión de mala fe. Se preguntó si acaso el parentesco político de Rodas con el ministro Núñez pueda influir para que el profesional no sea sancionado.
Fernández dijo que las defensas hasta ahora recurrieron a 87 incidentes dilatorios.
En la diligencia de ayer que fue paralizada también estuvieron presentes los acusados Ricardo Antonio Pereira Poletti con su abogado Fabio Erico Sosa, Édgar Rolando Mengual Herken y su abogado Víctor Dante Gulino, y Aurelio Ramón Sosa Álvarez, quien ejerce su propia defensa.
Para el lunes 9 de setiembre, están convocados ante el juez Delmás los exconsejeros de Cajubi Mariano Escurra Vicésar, José Salvador Alonso Martínez, José Szwako Demiañuk, Walter Elías Delgado Añazco, César Amílcar Bejarano Filippi, Pabla Mieres de Scavenius y el exsíndico Édgar Rolando Mengual Herken.
El daño patrimonial a la Cajubi con las operaciones de “inversiones” de alto rendimiento colocadas en la firma First Canadian fue de 1.700.000 dólares canadienses.
Hay otros cuatro procesos abiertos a estos exmiembros de la Caja por un perjuicio de unos US$ 100 millones.