Cuatro policías sumariados por supuesta extorsión a brasileños

La Jefatura de Policía del departamento de Amambay inició un sumario a un oficial y a tres suboficiales de la comisaría 1ª de Pedro Juan Caballero tras la denuncia, por WhatsApp, de un turista brasileño que aseguró haber sido secuestrado junto a otros tres compatriotas y obligados a pagar 2.000 reales para ser liberados.

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PEDRO JUAN CABALLERO (Cándido Figueredo Ruiz, de nuestra redacción regional). Los policías sumariados son el oficial inspector Mario Huerta Noldin, el suboficial mayor Jorge Rubén Rivas, el suboficial primero Romualdo Villalba y el suboficial primero Ronys Lezcano.

El jefe de la comisaría 1ª, comisario principal Édgar Galeano, nota mediante solicitó la apertura del sumario a los cuatro subalternos que efectuaron la demora de los brasileños y al mismo tiempo puso su cargo a disposición de la Jefatura de Policía del Amambay.

Se viralizó

El hecho tomó estado público el pasado fin de semana cuando el ciudadano brasileño Euver Silveira Correa Mathias, de 31 años, denunció la supuesta extorsión a través de un video que se viralizó por la red social WhatsApp.

Según contó el brasileño, llegó a esta frontera desde la ciudad de Panorama, estado de São Paulo, Brasil, en su vehículo Ford Fiesta Sedán, con chapa EAL 2898 del municipio de Panorama, a fin de realizar compras.

El brasileño dijo que estaba acompañado de sus compatriotas Paulo Roberto Aureliano de Carvallo (30), Francisco Betanim (42) y Luciano César Sabiado (39).

El pasado jueves, una vez en territorio paraguayo, los brasileños fueron demorados en un control callejero por la Policía, en una supuesta verificación rutinaria.

Sin embargo, el grupo policial a cargo del oficial inspector Mario Huerta Noldin trasladó el vehículo y sus ocupantes a la sede de la comisaría.

¿Desnudados?

Ya en la sede policial, según la denuncia, los brasileños fueron desnudados y encerrados en el calabozo.

Los denunciantes señalaron, según el video, que los agentes les exigieron el pago de 5.000 reales para ser liberados.

Ante la negativa de los brasileños, que aludieron que no poseían esa suma, finalmente se llegó a un acuerdo y pagaron 2.000 reales, siempre según la denuncia.

Por su parte, el comisario principal Galeano informó a la Jefatura de Policía que, efectivamente, el vehículo y sus ocupantes fueron trasladados hasta la sede policial a fin de verificar tanto la condición del rodado como las documentaciones de los extranjeros.

Pero negó que se le haya solicitado dinero alguno y señaló que tras verificar sus identificaciones, con la Policía Civil de Ponta Porã, se pudo comprobar que los brasileños no poseían ningún antecedente y fueron liberados.

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