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El fiscal adjunto Federico Espinoza, quien interina a Carlos Arregui, dispuso que la agente siga con la causa abierta contra la exasistente fiscal Vania Báez Bogado, imputada y presa en el Buen Pastor por la comisión de siete hechos punibles.
El fiscal Cantero fue recusado por el abogado Juan Claudio Gaona, quien entró a intervenir por la defensa de la procesada. El letrado alega “enemistad” con Cantero por problema de tinte privado, ya que, según dijo, fue novio de su hija.
El recusado, por su parte, si bien rechaza los términos que alegó Gaona, dejó a criterio del adjunto de la Unidad la reasignación de la causa, “para evitar innecesarias exposiciones de cuestiones que hacen a su vida privada”.
De esta forma, el caso está teniendo derivaciones insospechadas, debido a la gravedad de la denuncia que presentó el fiscal de la Unidad Antidrogas, Marcelo Pecci, sobre el robo de más de G. 40 millones en efectivo, además de artículos valiosos.
Supuestamente, empieza el operativo “blanqueo” de los hechos y esto se debe a que el manejo irregular de los indicios recolectados en procesos a narcotraficantes salpicaría a funcionarios de alto rango, quienes tenían la obligación de ejercer un estricto control.
La exfuncionaria imputada ya fue favorecida con la declaración de su exjefe Francisco de Vargas, actual ministro de la Senad, que ratificó el manejo totalmente negligente de las evidencias en la Unidad que antes estaba a su cargo. Pecci fue quien reemplazó a De Vargas e hizo la denuncia penal.