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El domingo de madrugada, en la avenida Santísima Trinidad y Zavala, en el barrio Campo Grande, Wilfrido Alejandro Florentín dijo que al esquivar un bache salió del pavimento y se estrelló contra una columna de la ANDE.
A raíz de ese impacto, el poste se rompió en la base y cayó sobre el edificio de un comercio instalado en el lugar.
El perjuicio e inconveniente que produjo a todos los vecinos por corte de luz o por suspensión del servicio de TV cable o tal vez el daño a algún electrodoméstico, hay que cobrárselo con el repudio de quienes conocen a las personas que hicieron el daño.
Unos G. 6.000.000 cuesta a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) la destrucción de un poste de cemento del tenido eléctrico a causa de choques de vehículo. Los percances se multiplican los fines de semana sobre las principales avenidas de la capital y ciudades aledañas, protagonizados por automovilistas que están bajo los efectos del alcohol.
A los G. 6.000.000, que es el valor de cada una de las columnas, se deben sumar las pérdidas causadas por el corte de la energía eléctrica, que casi siempre viene aparejado al problema, y más aun cuando los accidentes se registran en zonas comerciales.