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El caso de Carolina Marín, de 14 años, volvió a poner al tapete los abusos que sufren los menores que son tenidos como criados y quedan a cargo de tutores, con la promesa a los familiares de estos, que son de escasos recursos, de mejor vida y educación.
La adolescente falleció a consecuencia de múltiples golpes, en Vaquería, el 20 de enero de 2016. En un juicio oral, su “patrón” el militar Tomás Ferreira fue condenado a 15 años de cárcel por la muerte a golpes, en tanto que su esposa, Ramona Melgarejo, a 7 años de pena privativa de libertad.
Sin embargo, ahora la Cámara de Apelaciones de Coronel Oviedo, integrada por Miguel Ángel González, Alberto Godoy y Rogelio Silvio Frutos, por unanimidad, determinó que los años otorgados a Melgarejo son pocos, tomando en consideración que la víctima estaba a su cuidado.
Por este motivo, hicieron lugar, en parte, a la apelación del abogado querellante Enrique Villagra, y reenviaron a un nuevo juicio oral y público para que se vuelva a determinar la cuantificación de la pena.
El profesional había apelado el fallo dictado el 14 de junio del 2017 por el tribunal de sentencia de Coronel Oviedo, integrado por los jueces Nimia Esther Ferreira, Víctor Vera Valloud y Angel Eugenio Fiandro.
Para el Tribunal de Apelación, el colegiado de primera instancia aplicó una pena que “está por debajo de la pena media prevista dentro del marco legal”.
A su vez, indicó que de diez circunstancias, solo 3 fueron favorables a la tutora, mientras que 7 están en contra. Es por este motivo que se debe realizar un nuevo juzgamiento con relación al quantum de la pena.
“Con objeto contundente”
Durante el juicio oral, el médico forense de la fiscalía de Yhú, Fredy Muñoz, declaró que las lesiones mortales de Carolina Marín (14 años) fueron por recibir agresiones con un objeto contundente, como palo, varilla, piedra u otro tipo de material. El fallecimiento de Carolina se debió a múltiples lesiones sufridas en sus órganos vitales, como en uno de los pulmones, en parte del corazón, y por el estallido de uno de los vasos sanguíneos, entre otros, ocasionados por los golpes.