Buscan descongestionar problema de la superpoblación en Tacumbú

Un pabellón para alojar a 150 convictos fue habilitado ayer en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú en el marco de los trabajos que buscan paliar el problema del hacinamiento. La población del reclusorio orilla los 4.000 internos, de los que solo 841 tiene condena. El presidio tiene capacidad para albergar a 1.200 reos.

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El nuevo pabellón, que estará a cargo de la iglesia Adventista del Séptimo Día, fue habilitado ayer en un acto que contó con la participación de la ministra Sheila Abed; el director de la cárcel de Tacumbú, Dr. Artemio Vera, y el pastor Ignacio Kalbermatter, titular de la citada confesión religiosa en el Paraguay.

“Continuaremos con el mejoramiento del sistema carcelario y estamos trabajando en ello. Contamos con el apoyo de las iglesias y también del Gobierno nacional”, indicó Abed, durante la inauguración. “No queremos ser simples depósitos de seres humanos”, añadió.

La secretaria de Estado informó que la construcción del nuevo pabellón demandó una inversión de 2.000 millones de guaraníes, aunque aclaró que fue financiado por iglesia Adventista y que los propios reclusos participaron de su edificación.

Sostuvo que el pabellón será destinado principalmente a los reclusos que son adictos a las drogas y que allí se trabajará en su tratamiento y reinserción social.

Hasta ayer la población penal integraban 3.955 convictos, de los cuales solo 841 cuentan con una condena fija. “Estamos trabajando en un proceso, un plan que nos permita ir descongestionando la población penitenciaria. Se requiere de mucho esfuerzo”, dijo por su lado el director Vera.

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