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El delincuente Roberto Ríos gozaba de libertad condicional desde el 20 de noviembre de 2014, cuando fue beneficiado por el juez de Ejecución Víctor Manuel Medina Silva, según confirmaron ayer funcionarios de la penitenciaría regional “Padre Juan Antonio de la Vega” de Emboscada.
El criminal, sin embargo, tenía que salir en libertad recién en el año 2020 si es que se respetaba la sentencia de 25 años de cárcel que le impusieron por el asesinato a tiros del abogado Federico Mario Steiner Molas, ocurrido el 14 de julio de 1995 en un asalto en su casa del barrio Obrero de Asunción.
Pero, paralelamente, Roberto Ríos tenía otra condena de 17 años, por otro sonado crimen, el del aduanero Galo Antonio Flor Rivas, quien fue secuestrado, asesinado y quemado dentro de su vehículo, el 16 de abril de 1995, en Villa Elisa.
Durante los 19 años que permaneció encerrado Roberto Ríos recorrió casi todas las cárceles del país, ya que se dedicaba a extorsionar a víctimas de robos de vehículos y a vender drogas a sus compañeros de celda.
Un kilo y medio de oro
Roberto Ríos, ahora, surge como el líder de la banda que robó alrededor de 60 millones de guaraníes (en diferentes monedas) y aproximadamente un kilo y medio de oro, al tomar por asalto el domingo de mañana la residencia del empresario chino Cheng Chi Lo en Salto del Guairá.
El atraco fue materializado por al menos 10 maleantes vestidos de policías, quienes simularon un allanamiento.
Roberto Ríos fue identificado debido a que el sábado de mañana fue retenido en una barrera policial, en el Km 7 de Salto del Guairá, a bordo de un automóvil Mercedes Benz rojo, en el cual también circulaban Derlis Jonathan Ruiz Díaz y Esteban David Cañete Ríos, este último ya capturado.
Tras verificar las documentaciones se dejó pasar el vehículo.
El mencionado coche Mercedes Benz rojo, justamente, fue uno de los tres rodados utilizados al día siguiente para el golpe y después fue filmado en plena huida hacia Asunción, detrás de otro auto Mercedes Benz negro perteneciente al entonces jefe de Investigación de Delitos de Canindeyú, comisario principal Humberto López.
Aunque el uniformado aseguró que la aparición de su vehículo en el video fue casual, tanto él como el resto de sus subalternos fueron destituidos y trasladados a Asunción para el sumario.