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El pequeño comentó que en lo que lleva dentro del proyecto ya leyó un total de siete libros y que cada uno le dejó un mensaje diferente.
Fabricio manifestó que del libro “Juan Salvador Gaviota”, aprendió que “cuando te caes te tenés que levantar otra vez, hay que intentar hasta que te salga”.
Así también señaló que otro libro que le gustó mucho fue el que lleva de título: “¿Quién se ha llevado mi queso?”. Según dijo, le enseñó que no debe rendirse ante los obstáculos.
En ese contexto comentó que tiene un hermano mayor que es adicto a las drogas y al que intenta ayudarle todos los días a través de la lectura, pero que hasta el momento no lo consiguió.
A través de otro libro, “El hombre de la armadura oxidada”, analizó que cada persona tiene una armadura que son los problemas, y que con el tiempo esos se vuelven pesados, por lo que cada uno tiene luchar para despojarse de ellos y así poder ser feliz.
Añadió: “me siento mejor, porque antes tenía vergüenza de hablar con el micrófono en mi mano y ahora puedo hablar sin problemas”.