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Paulo Jacques supuestamente era uno de los hombres de confianza de Pavão, a tal punto que se encargaba de los negocios que este tenía con el prófugo Galán y en algunas ocasiones servía de chofer para los familiares del capomafioso actualmente recluido en la Agrupación Especializada de la Policía Nacional.
De acuerdo a los investigadores, Jacques intentó visitar el domingo último a Pavão, pero este ya no lo recibió supuestamente porque se había acabado la hora de visita; sin embargo, otras fuentes señalaron que el reo no lo quiso recibir, por lo que debió dejar en la guardia algunos regalos que le llevó por el año nuevo, explicaron.
Los agentes sospechan que los responsables del atentado contra Jacques son elementos de la organización criminal que Rafaat manejaba en Pedro Juan Caballero, que ahora se trasladaron a la capital tras reagruparse y cuyo objetivo sería eliminar a Galán y debilitar la estructura de Pavão, a quien consideran un traidor ya que habría dado permiso para que eliminen a Rafaat.
Los uniformados explicaron que unas semanas atrás el propio Jarvis Chimenes Pavão habría recibido una información de que iban a intentar matarlo en el cuartel de la Policía donde está recluido. Supuestamente por ello el capomafioso no utiliza el único día a la semana que tienen permiso para salir a recrearse en el patio del reclusorio.
Poco después de las 13:00 del lunes último un grupo de sicarios a bordo de dos vehículos interceptaron en el barrio Republicano de la capital a Paulo Jacques, quien junto a su pareja y una hermana de esta última, identificada como Mirelly Soares, se dirigían a un restaurante.
Jacques y su mujer fallecieron en forma instantánea al ser alcanzados por disparos efectuados por los pistoleros y la camioneta en que se desplazaban fue a parar contra una casa. Mientras que la tercera ocupante de la camioneta logró sobrevivir y los criminales escapar de la zona.