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El siniestro ocurrió en Francisco Bogarín y Riacho Negro, del barrio Paz del Chaco de Lambaré.
El negocio pertenece a Enrique Servián, quien señaló que presume que el fuego se inició por las chispas que provinieron de un brasero, aunque no descarta un cortocircuito.
La víctima del siniestro dijo que su pérdida orillaría los 80 millones de guaraníes.
Otro caso
Otro incendio se produjo ayer de madrugada en la avenida Pedro Torales y Unión Paraguaya de la ciudad de San Antonio.
Igualmente, agentes de la comisaria local señalaron que el fuego destruyó una habitación y se habría iniciado por las chispas producidas por los carbones de un brasero.
Las temperaturas bajas extremas, que seguirían en casi todo el país hasta antes del fin de semana, motivaron que miles de familias recurrieran a los braseros para tratar de aplacar el frío.
Pero a la vez, esta herramienta se puede convertir en una trampa mortal, como ya ocurrió anteriormente.