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Carlos Cabrera se dio por detenido cerca del mediodía, al presentarse en la sede policial y admitir el crimen de la argentina Jorgelina Isabel Sanabria, una madre soltera que deja dos hijos menores. La mujer acusó un tiro en el estómago mientras tomaba tereré sentada en el patio de su casa, situada en la calle Cástulo Franco entre Scouts del Chaco y Doctor Sosa, Fernando de la Mora.
“Fue en defensa propia, porque nos salieron ellos, los olimperos. Yo salí de mi trabajo y me iba con una amiga a la cancha. Ellos salieron y empezaron a perseguirnos”, relató el barrabrava de Cerro Porteño.
Según Cabrera Giménez, desde hace tiempo mantiene una rivalidad con el hincha de Olimpia Marcelo Luis Battaglia Tescari, conocido como “Chelo”, quien vive a media cuadra de la casa de la argentina Jorgelina Isabel Sanabria.
“Yo disparé al suelo nomás, pero me asusté y corrimos cuando vi que ellos me empezaron a seguir con un vehículo”, relató.
El joven reveló que recién en la cancha de Cerro Porteño se dio cuenta de que había matado a alguien y se escondió durante toda la noche del domingo y la mañana de ayer, hasta que decidió entregarse.
“Que me perdonen, ahora voy a asumir las consecuencias. Cuando pueda voy a ayudar a esas dos criaturas que quedan”, declaró el detenido al ser consultado sobre la familia de la fallecida.