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El comisario principal Gilberto Fleitas, titular del departamento Antisecuestro de la Policía paraguaya, contó ayer que durante las primeras horas del secuestro del niño de 12 años se llevó a cabo una importante reunión “a puertas cerradas” entre funcionarios de la Fiscalía y agentes de la Policía de nuestro país, con los efectivos de las Policías Civil y Federal del Brasil y los familiares del menor cautivo.
El niño fue capturado el jueves a las 07:30 cuando era llevado a su colegio, en un camino de Ponta Porã, en el lado brasileño de la frontera seca.
Fleitas señaló que, afortunadamente, los policías brasileños y los familiares del niño aceptaron y siguieron las recomendaciones de las autoridades paraguayas, que tienen más experiencia en este tipo de negociaciones.
De hecho, el jefe policial paraguayo indicó que debido a la presión ejercida por los organismos de seguridad en ambos lados de la frontera los criminales optaron por dejar nuevamente en libertad al menor, a unos tres kilómetros del centro de Pedro Juan Caballero, cerca de las 23:00 de ese mismo día.
Aparentemente, el niño estuvo todo el tiempo retenido en el lado paraguayo, luego de ser tomado a la fuerza en territorio brasileño.
Sobre otros detalles del suceso, Fleitas manifestó que, como la víctima es menor de edad, no trascendieron aún muchos datos y que el caso será llevado por la justicia brasileña.