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Poco después del mediodía, los cuatro delincuentes llegaron hasta el puesto de peaje a bordo de dos motocicletas, que dejaron estacionadas en las parte posterior de una de las casetas.
Rápidamente, uno de los malvivientes redujo a golpes de puño y patadas al suboficial principal Virginio Araújo de la comisaría de Itá, quien era el solitario resguardo del lugar a esa hora, debido a que su camarada estaba almorzando.
Luego, los delincuentes ingresaron a la oficina administrativa, donde redujeron a la encargada del peaje María Gloria Duré (38). Casi al mismo tiempo los cajeros Ramón Colmán (58), Miguel Ángel Zayas (36) y María Selva Jara Zayas (36) fueron tomados de rehenes y obligados a punta de armas a entregar todo el contenido de sus cajas a uno de los malvivientes, quien cargaba una bolsa.
Los delincuentes se alzaron con G. 95.000.000, que sería toda la recaudación del fin de semana. Tras concretar el golpe, abandonaron las casetas y abordaron nuevamente las motos y se alejaron del sitio.
Tras la denuncia del hecho, agentes de las distintas comisarías aledañas llegaron a la zona para rastrear a los asaltantes.
Minutos después un vecino de la compañía Itá Potrero denunció que cuatro desconocidos abandonaron dos motos en su propiedad y luego abordaron un auto gris en el que se alejaron de la zona.
De acuerdo a los investigadores, el sitio no cuenta con circuito cerrado, pero una de las cámaras que se accionan con el paso de los vehículos logró captar la imagen de uno de los asaltantes.