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Las agentes piden elevación de la causa a juicio oral con relación a Nicolás Xavier Jara Acosta y María Teresa Acosta de Jara (dueños de la empresa) y la abogada Mercedes Lucila Martínez Galeano, acusada también por usura y estafa.
De acuerdo a los antecedentes, la docente de la escuela Taciana Villalba, de San Lorenzo, dijo que la empresa le ofreció el año pasado un préstamo de G. 500.000 y un televisor plasma de 32 pulgadas, a ser abonados en cuotas de G. 100.000, que debían ser descontados de su salario.
Según indica, recibió el dinero pero no el electrodoméstico. Tampoco se le descontaron las cuotas de G. 100.00, sino que fue objeto de un juicio ejecutivo por nada menos que G. 6.950.000.
La estafa no quedó ahí, debido a que la misma firma le ofreció el mismo año (a través de otro vendedor) un teléfono celular por valor de G. 700.000, cuyas cuotas a abonar por su parte quedaron en G. 220.000.
En esa ocasión firmó un formulario de autorización de descuento, al que le “anexaron” un pagaré a ser ejecutado por vía judicial.