Disputa entre traficantes deriva en persecución y una muerte en Ñemby

Una aparente disputa entre dos bandas de microtraficantes derivó ayer de madrugada en una persecución y tiroteo que acabó con la vida de un joven de 22 años, en Ñemby. Supuestamente, momentos antes de su muerte, el líder de una de las facciones quemó el vehículo de su adversario, quien por su parte cobró venganza a balazos.

La camioneta Suzuki Vitara que quedó bajo fuego en medio de la persecución terminó estrellada contra una columna y una muralla de una casa, en Ñemby.
La camioneta Suzuki Vitara que quedó bajo fuego en medio de la persecución terminó estrellada contra una columna y una muralla de una casa, en Ñemby.

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El protagonista principal de esta penosa historia es Sergio Denis Romero, de 22 años, apodado Charly, quien según la Policía era un distribuidor de drogas de Ñemby y alrededores.

Agentes de la oficina de Investigaciones del departamento Central relataron que aparentemente Charly tenía un problema con uno de sus competidores, cuyo grupo días antes se hizo pasar por una comitiva de la Senad para “allanar” su casa y robar drogas y dinero.

Decidido a tomar represalias, Charly fue a buscar a su adversario el sábado de noche. Lo hizo en compañía de su novia Yessica Araceli González Barros, de 22 años, y de un amigo identificado como Gustavo López, de 19 años.

La venganza de Charly consistió en quemar el vehículo de su rival, con combustible que había comprado momentos antes de un surtidor de Ñemby.

Sin embargo, el atentado salió relativamente mal, porque la botella con el combustible explotó y le produjo quemaduras a Gustavo López.

Ante este nuevo escenario, Charly y su novia tuvieron que dejar de lado su venganza, socorrieron a Gustavo y lo llevaron al Hospital de Ñemby, para que este último fuera atendido por sus quemaduras.

Aproximadamente a la 01:50, los tres salieron de dicho centro asistencial en una camioneta Suzuki Vitara, con chapa BAX 065, y se dirigieron hacia la casa de Charly, que queda en el barrio Mbocayaty de Ñemby.

Sin embargo, el grupo contrario ya los venía siguiendo desde el hospital, para cobrarles por haber intentando quemar momentos antes el vehículo de su líder.

Sergio Denis Romero, alias Charly, su novia y su amigo se dirigieron desde el centro de Ñemby por la ruta Acceso Sur con dirección a la capital del país, aunque a 2.000 metros doblaron a la izquierda, en la avenida Capitán Bado.

Ni bien ingresaron a esa arteria, la camioneta de los tres jóvenes empezó a ser rociada a tiros desde otro vehículo, presuntamente un coche Toyota negro.

Charly condujo su camioneta unos 1.000 metros mientras trataba de eludir al tirador. Sin embargo, uno de los balazos atravesó la chapería e impactó contra el pecho lado izquierdo del chofer, cerca de su corazón.

En cuestión de segundos, Charly se debilitó y ya no pudo controlar su vehículo, que terminó estrellado contra una columna y la muralla de una casa.

Bomberos auxiliaron a Charly, pero este no soportó. Su novia sufrió heridas de refilón en la pierna. El amigo de ambos, quien estaba con quemadura, huyó del sitio.

Reanimación en asfalto

Inmediatamente después de producirse el caso de sicariato ayer de madrugada, intervinieron agentes de la comisaría 014 de Ñemby, quienes por su parte al llegar no dudaron en auxiliar al conductor Sergio Denis Romero, alias Charly.

Los policías lo alzaron a una patrullera y salieron raudamente del lugar, pero a unos 200 metros pararon de nuevo la marcha ante la presencia de bomberos voluntarios quienes bajaron al joven y por más de media hora intentaron reanimarlo en pleno asfalto.

Paramédicos de SEME también se sumaron a la tarea con maniobras de reanimación, pero lamentablemente todo fue en vano.

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