Sicario del Comando Vermelho mata a tiros a un hacendado en Cap. Bado

Un hacendado fue ultimado ayer en un atentado a tiros registrado en pleno centro de la ciudad de Capitán Bado. Los pistoleros, uno de ellos del Comando Vermelho, fueron detenidos cuando intentaban escapar del sitio.

Wenseslao Oviedo Acosta (i), junto con Rubén Torales Huerta, presuntos sicarios detenidos.
Wenseslao Oviedo Acosta (i), junto con Rubén Torales Huerta, presuntos sicarios detenidos.

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CAPITÁN BADO. (Cándido Figueredo Ruiz, de nuestra redacción regional). La víctima fue el ganadero brasileño Aguinaldo Correa Lemes (48), quien sufrió al menos siete impactos de bala calibre 9 mm, en el cuello y cabeza.

En tanto que los presuntos pistoleros detenidos como responsables de este alevoso crimen son Wenseslao Oviedo Acosta (38), domiciliado en el barrio Obrero de esta localidad, y el brasileño Rubén Torales Huerta (29), quien cuenta con dos antecedentes en el vecino país. El mismo sería miembro de la organización criminal Comando Vermelho y según fuentes de la Policía Civil, el sospechoso salió recientemente de la cárcel.

Del poder de los sicarios se incautaron la motocicleta que utilizaron para desplazarse y el arma homicida, una pistola calibre 99mm, con un cargador con cinco cartuchos en su interior.

De acuerdo con los investigadores, la víctima residía en su establecimiento ganadero ubicado en la colonia Paso Itá, distante unos 40 kilómetros al sur de Capitán Bado.

En la mañana de ayer Aguinaldo estaba dentro de su camioneta estacionada sobre la calle República Argentina casi Avenida Internacional, frente mismo a un local de venta de baterías. Fue en ese momento que se le acercaron ambos sicarios a bordo de una moto y uno de ellos, presumiblemente Torales, lo acribilló.

La víctima falleció casi en forma instantánea al sufrir siete impactos, distribuidos en la cabeza y el cuello. Luego los criminales intentaron escapar de la zona hacia territorio brasileño. Sin embargo, patrulleros de la comisaría jurisdiccional que estaban apostados a unas cuadras del sitio fueron alertados de lo ocurrido y en una rápida reacción llegaron a la escena del crimen.

Los pistoleros fueron sorprendidos en plena huida e intentaron abrirse paso a tiros, lo que generó un breve enfrentamiento a tiros con los agentes, pero al verse acorralados se rindieron. Ambos se negaron a delatar a la persona que los contrató para el ataque, informaron.

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