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El nuevo ataque del EPP se produjo el lunes de noche en la estancia Ñandu’i, situada en la colonia Arako’ê de Amambay, a 4.500 metros del cauce del río Ypané, que a su vez es el límite natural con el departamento de Concepción.
La aparición del EPP se produjo en jurisdicción de Pedro Juan Caballero, cuyo centro urbano se encuentra a 73 kilómetros en línea recta. Capitán Bado se halla a 60 kilómetros, Karapã’i a 53 kilómetros, Azote’y a 45 kilómetros y Yby Yaú a 48 kilómetros, todos en línea recta.
Según los datos recabados por el Comando de Operaciones de Defensa Interna (Codi), el ataque se inició a las 19:00, cuando el “comandante” del EPP, Osvaldo Daniel Villalba Ayala, de 36 años, ordenó el asalto al casco central de la estancia, que funciona en medio de una reserva de monte de 143 hectáreas, prácticamente en la falda del conocido Cerro Guasu, que es considerado sagrado por las comunidades indígenas locales.
Junto al líder del EPP actuaron al menos 20 personas más, la mayoría de ellas indígenas, que por su parte enseñaron un panfleto que los identifica como la “brigada indígena contra matones de estancia”.
El grupo armado tomó de rehenes a 17 empleados de la estancia, mientras esperaban al administrador, el brasileño Avelino Camargo, de 59 años de edad.
Cuando este llegó en su camioneta al portón de entrada, ya fue recibido a balazos. El brasileño también llegó a disparar un arma que tenía, pero cayó abatido al intentar descender del vehículo. Entonces los delincuentes se acercaron y quemaron el rodado. La mitad del cuerpo del brasileño también se quemó.
No está conforme
Esta pasa a ser el quinto golpe del EPP en el Gobierno de Mario Abdo Benítez y el tercer homicidio.
A propósito, Marito aseguró ayer que el Gobierno continuará la lucha frontal contra el crimen organizado, reconociendo que en ese proceso se tendrán que sortear muchos inconvenientes ya que existe una reacción de los criminales.
El jefe de Estado admitió que no está conforme con los resultados que se están obteniendo durante su mandato y que “cuando el crimen organizado diseña, evalúa, explora un lugar donde efectuar este tipo de ataques, es muy difícil contener en todas las oportunidades”.