A primera hora de la mañana, Miguel Angel Rodríguez, un agresivo entrevistador de RCTV, recibió a Marcel Granier, director general de la televisora, quien dijo que su salida del aire “marca el giro hacia el totalitarismo” en Venezuela.

“Cuando la gente compare mañana lo que tenía y lo que le están entregando se va a dar cuenta del fraude y va a sentir una gran indignación”, añadió Granier, en alusión a la televisora que reemplaza a su canal, TVes. También pidió a la población que mantenga la calma ante el fin de emisión de RCTV.

Durante toda la mañana desfilaron por un plató desbordante y adornado con una enorme bandera venezolana los empleados de la televisora, que relataron su relación familiar con la empresa, lo que significó para sus carreras y sus vidas y lanzaron fuertes críticas al Gobierno.

Entre risas y lágrimas, todos dieron un fuerte tono emotivo a su despedida de los televidentes.

En la programación participaron los animadores preferidos de la farándula, actores y guionistas de producciones dramáticas, humoristas del programa más longevo de la televisión latinoamericana, Radio rochela.
“Vamos a realizar un programa especial”, explicó Pepeto López, un cómico histórico de la cadena. “Nosotros tenemos mucho optimismo de que en algún momento se vuelva a emitir”, respondió, preguntado sobre el futuro de Radio rochela, un programa que está inscrito en el libro Guiness por su permanencia en el aire.


LOS MEDIOS, DIVIDIDOS

Los medios venezolanos se mostraron divididos ante la desaparición de (RCTV): mientras los oficiales aplauden, otros privados no se pronuncian, algunos condenan la medida y otros la justifican, en consonancia con las mismas actitudes observadas en la población en general.

Unos disturbios enfrentaron a manifestantes contrarios al cierre y efectivos de la Policía frente al local de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, pese al insistente llamado a la calma a la población.