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“Tenemos que terminar con la impunidad para aquellos que cometen crímenes graves contra la humanidad”, señaló Ban en la apertura de una sesión especial del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas dedicada a la situación de las minorías en Oriente Medio.
El diplomático coreano recordó que hay pruebas claras de que varias minorías de la región han sido “víctimas de crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y otras serias violaciones y abusos de los derechos humanos”.
“Hay millones de vidas en juego, así como el tejido social de países enteros. Ahora mismo, miles de civiles están a merced del Estado Islámico”, alertó Ban.
Ban adelantó, además, que la ONU está trabajando en un plan de acción para prevenir el extremismo violento, que presentará en septiembre, y anunció que reunirá a un grupo de expertos en la región para tratar las actuales tensiones sectarias.
Por su parte, el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, alertó: “No nos equivoquemos, en Oriente Medio nos estamos enfrentando a un bárbaro y sistemático proceso de erradicación étnica y religiosa”.
Fabius recordó que el proyecto del EI pasa por “suprimir” a “todo el que no piensa como ellos” , ya sean cristianos, yazidíes, turcomanos, kurdos, shabaks u otros musulmanes.