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Curas pederastas. Los líderes de la Iglesia católica irlandesa están acusados de encubrimiento a cientos de curas sospechosos de haber abusado sexualmente de miles de niños durante varias décadas. Las primeras acusaciones aparecieron en los años 1980, en el inicio de una ola de revelaciones que acabaría siendo mundial. Estas darían lugar a varias investigaciones y a juicios civiles y penales.
Lavanderías de la Magdalena. Entre 1992 y 1996, más de 10.000 niñas y mujeres trabajaron gratis en lavanderías, explotadas comercialmente por religiosas católicas en Irlanda. Las internas, apodadas las “Magdalene Sisters” (Hermanas de la Magdalena), eran principalmente niñas que quedaron embarazadas fuera del matrimonio o que tenían un comportamiento considerado “inmoral”, especialmente víctimas de violación o prostitutas. En más de una cuarta parte de los casos, el Estado era responsable de haber enviado a estas mujeres a estas lavanderías.
Fosa común. En 2015, el gobierno irlandés investigó a 18 centros de nacimiento, que acogían a jóvenes solteras, para examinar su “alta tasa de mortalidad” de recién nacidos. Cerca de 800 niños nacidos en uno de estos centros fueron enterrados en una fosa común, entre 1925 y 1961.
Adopciones ilegales. Investigaciones revelaron el alcance de las prácticas de adopciones ilegales de niños nacidos de mujeres solteras, llevadas a cabo por el Estado irlandés con la complicidad de la Iglesia y agencias de adopciones. (AFP)