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¿Qué cambia para los palestinos haber pasado de “entidad observadora” a “Estado observador”?
Como “Estado observador” puede tomar parte de las convenciones internacionales, incluidas las de derechos humanos.
Un “Estado observador” puede convertirse en miembro de las organizaciones internacionales y podrían acudir al Tribunal Internacional de Justicia y a la Corte Penal Internacional, si estos consideran que pueden actuar como Estado constituido.
¿La iniciativa tendrá efectos sobre los acuerdos de Oslo?
Los acuerdos de Oslo son el resultado de conversaciones directas entre Israel y los palestinos, donde ambas partes acordaron que el reconocimiento de un Estado de Palestina se haría por consentimiento mutuo.
Esta última acción ante la ONU, por parte de la ANP, se trata de una iniciativa unilateral que, en cuanto tal, contraviene los acuerdos de Oslo, de 1993 y podría desembocar en una declaración de no validez y de revocación de los mismos.
¿El nuevo estatus reconocido a los palestinos influye en su responsabilidad en materia de prevención del terrorismo?
Sí. El reconocimiento aumenta la responsabilidad de los palestinos en prevenir ataques o amenazas terroristas que tengan origen en su territorio.
La responsabilidad está ligada al control efectivo ejercitado sobre el territorio, el principio de fondo es que no hay responsabilidad sin autoridad.
Los palestinos deberán tomar las medidas necesarias para prevenir las violaciones de derechos humanos de parte de organismos de gobierno u oficiales.
El crimen arbitrario de civiles o el lanzamiento de cohetes contra ciudadanos israelíes podrían ser materia de juicios de importantes comités de las Naciones Unidas o de la Corte Penal Internacional.
¿Qué implicancias tiene para los asentamientos israelíes en Cisjordania?
Si los palestinos acuden a la Corte Penal Internacional, el tema de los asentamientos podría convertirse en materia de la ley penal internacional. Lo cual, potencialmente, podría abrir la puerta a procedimientos contra los israelíes que construyan o expandan los asentamientos.
A favor y en contra
RAMALA y JERUSALÉN (ANSA). Los países que votaron por Palestina “tomaron posición en favor de la paz, la justicia, la moralidad y la decencia”, dijo la dirigente de la OLP Hannan Ashrawi, mientras que para el premier israelí, Benjamín Netanyahu, las naciones que lo hicieron en contra se inclinaron por la “verdad y la paz”.
Al día siguiente de la decisión de la ONU de incorporar a Palestina como “Estado observador no miembro”, dirigentes palestinos e israelíes hicieron lectura de lo sucedido.
“Han enviado un mensaje al pueblo palestino y al mundo, que proteger a quien es vulnerable y confrontar la agresión es posible en el contexto de la responsabilidad global. Han rescatado las posibilidades de paz apoyando las fuerzas de la razón y la responsabilidad, antes que el ejercicio israelí, irracional e irresponsable, de la fuerza y la violencia”, opinó Ashrawi.
Por su parte, el premier israelí, destacando el apoyo de nueve Estados que votaron contra la iniciativa, declaró: “Nueve países se expresaron ayer de parte de la verdad y la paz. La historia los verá bajo una luz positiva, deben ser elogiados”, sostuvo Netanyahu.
Con Mahmud Abás “no saldrán acuerdos de paz”, aseguró el vicecanciller israelí, Dany Ayalon, según el cual, con la votación “se borraron 4.000 años de historia del pueblo judío”.