Cargando...
LONDRES (AFP). La líder británica respondió así al intento de asesinato con un agente nervioso del excoronel Serguéi Skripal, de 66 años, y su hija Yulia, de 33, que se debaten entre la vida y la muerte diez días después del atentado en Salisbury.
Rusia “es culpable” del atentado, dijo May en el Parlamento británico tras cumplirse el ultimátum que Londres había dado a Moscú para explicar el ataque ocurrido contra un exespía ruso, perpetrado en suelo inglés y con armas químicas.
May explicó que Rusia reaccionó “con un completo desprecio” ante la “gravedad” del incidente, pese a que Londres le ofreció una “oportunidad” de que proporcionaran explicaciones.
Subrayó que el Kremlin respondió “con sarcasmo, menosprecio y resistencia” ante lo sucedido.
El Reino Unido recibió el apoyo de sus principales aliados, Alemania, Francia y Estados Unidos. Este último exigió que Moscú proporcione explicaciones “inequívocas”.
La líder británica y la canciller alemana, Ángela Merkel, consideraron que la comunidad internacional debería coordinar acciones en caso de que se confirmen las sospechas de que el Kremlin está detrás del intento de asesinato al antiguo agente de la inteligencia rusa, que fue captado por el MI6 británico en los años 90.
También, los 29 países de la OTAN urgieron a Moscú a “responder” a las demandas de Reino Unido.
May suspendió los contactos bilaterales de alto nivel, incluyendo una visita prevista del ministro de Exteriores ruso Serguéi Lavrov y toda representación diplomática británica en el Mundial de fútbol Rusia-2018.
Rusia “no admite” las acusaciones “sin pruebas” y los ultimátums de Londres sobre el envenenamiento del exespía Skripal, advirtió el Kremlin, que solo hizo un llamado al “sentido común”.
El secretario de Asuntos Exteriores británico, Boris Johnson, dijo que el envenenamiento constituía el primer uso de sustancias neurotóxicas en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
La crisis entre Moscú y Londres podría agravarse tras la muerte de otro exiliado, Nikolái Glushkov, de 69 años, que fue hallado muerto en su casa en Londres.
May era ministra de Interior cuando fue asesinado en Londres Alexander Litvinenko, en 2006, con una sustancia radioactiva (polonio-210) cometido con el consentimiento de Putin, según las conclusiones de la investigación oficial.