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SEÚL (ANSA, AFP). Tras la declaración, las tropas desplegadas en primera línea de Corea del Norte completaron los preparativos para “la acción militar contra el Sur”.
La poderosa Comisión Central Militar (CCM) de Corea del Norte, presidida por Kim Jong-un, dispuso proyectos de “ataques de represalias y contraataque a lo largo de toda la frontera”.
“Las grandes unidades combinadas del ejército popular de Corea en primera línea entraron en un estado de guerra al estar ya completamente armadas para lanzar operaciones sorpresa, llevando al máximo la disponibilidad de acción”, advirtió la agencia de noticias oficial KCNA.
Estados Unidos suspendió el ejercicio militar anual con Corea del Sur a raíz de la fuerte tensión con Corea del Norte, según fuentes oficiales citadas por la prensa estadounidense.
Según la última declaración de KCNA, los soldados de Corea del Norte están en espera de una “orden de ataque” para lanzar una acción capaz de destruir al enemigo.
Kim, refirió KCNA, presidió la reunión ordenando “al Ejército prepararse totalmente para las operaciones de guerra” contra Corea del Sur en zonas designadas y “poner bajo casi estado de guerra” desde las 17:00 del sábado (05:30 hora paraguaya).
“Ya hemos visto esto en varias ocasiones, lo cual no quiere decir que no sea peligroso”, dijo Yoo Ho-seo, profesor de estudios norcoreanos en la Universidad Coreana de Seúl. “Existe una verdadera posibilidad de que esta confrontación conduzca a una especie de enfrentamiento armado”, expresa.
Los militares norcoreanos negaron la versión de Seúl, que imputa al Norte la responsabilidad del “incidente de la tarde del jueves”, clasificando como “grave provocación militar” los 36 disparos de artillería lanzados por el Sur.
Los militares surcoreanos, en cambio, afirmaron que desde el Norte hubo dos ciclos de disparos: el primero fue un único proyectil de artillería antiaérea, mientras el segundo tuvo varios tiros de 76,2 milímetros.
Desde el Sur, en respuesta, hubo disparos de 155 milímetros.
Aunque por el momento no se reportaron muertes, la tensión puede empeorar tras el episodio de los dos soldados surcoreanos heridos a principios de agosto por la explosión de una mina en el lado sur de la zona desmilitarizada.
Según la vigilancia conjunta de los sistemas de radar de Seúl y Estados Unidos sobre las actividades militares de Pyongyang, Corea del Norte está realizando acciones en vista de un posible lanzamiento de misiles.
“El Norte está mostrando señales de preparativos sobre un misil Scud cerca de Wonsan y un misil Rodong en la provincia de Pyongan del Norte”, refirió una fuente anónima en el gobierno de Seúl.
Un Scud-C es capaz de volar hasta 500 km, y un Rodong, tiene un alcance máximo estimado en 1.200 kilómetros.