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En mayo de este año, el saliente presidente Horacio Cartes había tomado la histórica decisión de retornar la Embajada Paraguaya a Jerusalén.
El alcalde de esa ciudad, y aliado político del primer ministro Benjamín Netanyahu, recordó que el traslado de la sede de la Embajada de Paraguay, de Tel Aviv a Jerusalén, “fue un día de festejo, con significado importante” y agradeció al pueblo paraguayo por su amistad.
–¿Cómo tomó el gobierno israelí la declaración del nuevo gobierno de analizar mejor el cambio de embajada?
–No tengo dudas de que el presidente Mario Abdo entiende la importancia y el gran protencial de las relaciones con Israel. Hay una relación profunda entre ambos pueblos, y queremos fortalecer esos lazos.
–¿Los cambios de las embajadas de EE.UU., Guatemala y de Paraguay exigieron mayor seguridad a la ciudad?
–La ciudad es tranquila. Los miles de turistas y ciudadanos circulan en paz. En Jerusalén hay menos violencia que la que se registra en la región latinoamericana.
– Después de EE.UU., se sumaron Guatemala y Paraguay. ¿Esperaban que otras potencias se sumaran a esta decisión?
–Hay otros países que se están acercando e iniciando el proceso de traslado. En breve se conocerán. Esto no tiene que ver con política sino con hacer lo correcto.
Sabemos que Jerusalén es nuestra capital hace 3.000 años.
Proyectos tecnológicos
–¿Aprovechará su venida para compartir temas de interés bilateral?
–Vengo a promover la alta tecnología israelí, y queremos compartir estas experiencias con Paraguay; en especial sobre la agrotecnología y tecnología de alimentos.
Básicamente, los emprendedores israelíes en estos sectores están enfocados en mejorar la producción. Por ejemplo, hoy desarrollamos la lechuga en hidroponia; pepinos, producción lechera, desalinización de agua.
Se hace la investigación en Israel y se aplica en otros países o mercados internacionales. Apuntamos a la ecuación ganar-ganar, donde ambos países son beneficiados.
–¿Existe alguna experiencia práctica en Paraguay?
–Están llegando acá modelos. Tenemos ya un centro de experiencia en Alto Paraná.
Estamos convencidos de que en Paraguay se pueden desarrollar más los modelos de excelencia.
–Hablamos de transferencia de conocimiento tecnológico. Pero ¿llegarán empresas israelíes a Paraguay?
–El sector privado toma sus propias decisiones. Lo que hacemos es facilitar a través de acuerdos, como se hizo con China e India y el Mercosur.
Por ejemplo, hace 30 años el gobierno israelí con EE.UU. creó un fondo para incentivar a las empresas, y así creció la inversión.
Medio Oriente
–Sobre la subida de tensión en Gaza, ¿cree que podría empeorar?
–(El Oriente Medio enfrenta diversas tensiones políticas y militares. Una de ellas es la confrontación de grupos extremistas palestinos contra e Israel).
Quiero dar dos ejemplos sobre como funciona Medio Oriente: los ciudadanos árabes en el Estado de Israel son los más exitosos, son parte del Estado de Israel. Las condiciones de ellos son las mejores.
En cambio, están en peores condiciones los enemigos de Israel, como Hamás, Hezbolá o el Estado Islámico.
Israel mostró que busca la paz, como se hizo con Jordania y Egipto.
Si alguno está con la paz, dialogamos, si buscan violencia, debemos protegernos.
Hamás declaró que quiere destruir al Estado de Israel. Si no cambia esa aspiración, la situación de Hamás irá empeorando.
El Estado de Israel sabrá protegerse de la mejor manera.
–¿Hay avance para lograr un acuerdo con los grupos moderados?
–No hay ningún israelí que no quiera llegar a un acuerdo con los palestinos.
Pero la primera condición es que ellos, los socios, deben reconocer la existencia del Estado de Israel, si no, el acuerdo no vale.
No es un secreto que hay países árabes moderados que apoyan a Israel.
Irán, nuclear
–¿Son suficientes las sanciones de EE.UU. contra Irán para frenar su plan nuclear?
–Irán lo que quiere es destruir a Israel. Y en su lista están también los países de Occidente. Entendemos muy bien la amenaza iraní, y deben tomarse las acciones necesarias.
–¿Una eventual acción militar?
–Tengo la confianza plena en el primer ministro Benjamín Netanyahu.
Ya en el pasado Israel ha tomado acciones militares para detener el programa nuclear en Irak y Siria.
–Pero Irán tendría una fuerza de reacción mayor, y las consecuencias podrían ser más graves...
–Uno tiene que hacer, lo que tiene que hacer.
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