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Isabel II ha reinado durante más de 63 años y no muestra signos de que vaya a retirarse, aunque en los últimos años ha delegado parte de sus funciones en los miembros más jóvenes de la familia real.
Una nueva encuesta sugiere que el pueblo británico quiere que las cosas sigan así, y un 70% cree que debería reinar el mayor tiempo posible, el porcentaje más alto desde 1981.
El apoyo a la monarquía, como institución, sigue siendo elevado, con un 76% de aceptación, según la encuesta de Ipsos-Mori para el King’s College de Londres.
“La reina es muy popular, agrada personalmente y la gente opina que hizo un trabajo excelente”, dijo Roger Mortimore, profesor en el Instituto de Historia Contemporánea británica de esta prestigiosa universidad.
Las celebraciones de mañana serán de bajo perfil y los principales eventos públicos, incluyendo un desfile militar y un almuerzo para 10.000 personas en el Mall, la larga avenida frente al palacio de Buckingham, tendrán que esperar a junio, cuando se festeje oficialmente el cumpleaños, y el 63º aniversario de su ceremonia de coronación.
La reina, al frente de cuatro generaciones de la Casa de Windsor, presidirá una cena de cumpleaños familiar organizada por su heredero, el príncipe Carlos.
Carlos y su hijo Guillermo están asumiendo cada vez más funciones, aunque en 2015 la reina todavía asistió a 393 compromisos, incluyendo visitas de Estado a Malta y Alemania.
Ha visto desfilar 12 primeros ministros por Downing Street (oficinas y residencia del Gobierno) desde que ascendió al trono en 1952, reuniéndose una vez a la semana con ellos, además de recibir información diaria de las actividades del Parlamento.
En setiembre del año pasado, la reina rompió el récord de la reina Victoria y se convirtió en el monarca británico con más años en el trono.
La reina es tenida en una muy alta consideración como una presencia constante y estabilizadora en un mundo turbulento, una percepción que ha cultivado absteniéndose siempre de hacer públicas sus opiniones personales, y sin intromisiones en la política doméstica.