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ERBIL, Irak (EFE). Ayer las milicias se hicieron con el control de doce pueblos y cuatro colinas en el sur de Tal Afar, última región que todavía controla el EI en la provincia de Nínive, después de haber perdido su capital, Mosul, bastión de los yihadistas en Irak desde 2014.
El primer ministro iraquí y jefe de las Fuerzas Armadas, Haidar al Abadi, anunció en la madrugada de ayer el comienzo de la operación para “liberar” la comarca, que fue precedida por bombardeos de la aviación y el lanzamiento de folletos para informar a sus habitantes de cómo comportarse durante el desarrollo de los combates.
Al Abadi aseguró que los integrantes del Dáesh (acrónimo en árabe del Estado Islámico) solo tienen dos opciones: “rendirse o morir”.
La comandancia de las Operaciones Conjuntas iraquíes emitió un comunicado en el que detalló que las fuerzas que participan en la ofensiva son la IX División Blindada del Ejército, las Brigadas XV y XVI, unidades de las Fuerzas Antiterroristas y de la Policía Federal, además de las milicias progubernamentales Multitud Popular.
Las fuerzas se encuentran desplegadas en cinco frentes alrededor de Tal Afar: las tropas del Ejército se sitúan en el norte y el este, las de la Policía Federal en el noroeste y las de las Fuerzas Antiterroristas en el suroeste, mientras que las milicias apoyan a estos cuerpos.
Las tropas terrestres cuentan con la cobertura de la aviación del Ejército iraquí y la de la coalición internacional liderada por Estados Unidos.
Según informaciones reveladas por la Inteligencia militar, en Tal Afar hay más de 1.400 combatientes del EI de nacionalidades árabes y extranjeros.
Sin embargo, existe confusión respecto al número de civiles que permanecen en la región, pero la Organización de la ONU para Asuntos Humanitarios (OCHA) alertó que los que están huyendo ante los combates corren un “riesgo extremo”.
“Más de 30.000 personas ya han huido del distrito”, dijo la OCHA, que explicó que “las familias están viajando de 10 a 20 horas en condiciones de extremo calor para alcanzar los puntos de reunión y llegan exhaustas y deshidratadas”.