Exposición Universal de Milán

MILÁN, Italia (EFE). La Exposición Universal de Milán comenzó ayer con el propósito de concienciar sobre la importancia del derecho a la alimentación y con un llamamiento del papa Francisco contra el hambre, mientras se registraban protestas violentas de antisistema contra el evento en la capital lombarda.

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Una gran cantidad de público se agolpó desde primera hora en los accesos del recinto, aprovechando en Italia la festividad del 1 de mayo.

Mientras que en la ciudad, a unos kilómetros de distancia, se produjeron a primera hora de la tarde violentos enfrentamientos de grupos “antisistema”, opuestos al evento, contra las fuerzas de seguridad.

En la Expo, los pabellones de los 145 países que participan, recibieron ya sus primeros visitantes, que se verán tentados por un gran número de tiendas, cafeterías y restaurantes que les permitirán adquirir y degustar de una oferta gastronómica que pretende ser planetaria.

Mediante una videoconferencia desde la Ciudad del Vaticano, el papa Francisco recordó que el evento se desarrolla bajo el lema “Nutrir el planeta. Energía para la vida”, y pidió que esta frase esté acompañada “por la conciencia de los rostros de millones de personas que hoy tienen hambre, que hoy no comerán dignamente”.

Durante los 184 días de la Expo, los más de 20 millones de visitantes previstos podrán conocer las propuestas de los países en materia de buenas prácticas y las soluciones innovadoras en materia de producción sostenible de alimentos.

Latinoamérica está presente con los pabellones propios de Brasil, Argentina, Chile, México, Ecuador, Colombia y Uruguay.

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