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La agencia no precisó si los dos aparatos chinos sobrevolaron la zona en disputa en torno a las islas Diaoyu, llamadas Senkaku por Tokio, y se limitó a informar que los aparatos chinos tenían como misión “contrarrestar” y “vigilar” a los cazas nipones que ejercían una presión sobre el patrullero Y-8 chino.
Este incidente ilustra la degradación de la situación entre los dos países, que mantienen posiciones inflexibles sobre su diferendo.
El archipiélago en litigio, situado a 200 km al noreste de las costas de Taiwán, que también las reivindica, y a 400 km al oeste de la isla de Okinawa (sur de Japón), ocupa una posición estratégica y en los fondos marinos de la zona podría haber hidrocarburos.
Esta situación tiene lugar dos días después de que el gobierno japonés convocara al embajador de China, por primera vez desde la entrada en funciones del primer ministro Shinzo Abe, para “protestar vigorosamente” contra la recurrente presencia de navíos chinos en aguas cercanas a las Diaoyu.
Abe criticó ayer a China porque, en su opinión, maltrata a las empresas japonesas.
“Agredir con fines políticos a las compañías japonesas y a los ciudadanos japoneses que se encuentran en China, donde contribuyen a la economía (del país), no es correcto por parte de un Estado responsable”, declaró Abe.
Y añadió: “No solo afecta a las relaciones bilaterales sino que además tiene un impacto muy negativo en la propia economía china”.
En setiembre se produjeron manifestaciones y destrucciones de bienes nipones en China tras la nacionalización parcial por Japón de las islas Senkaku.
Reclamo de tres países
China y Taiwán, en forma paralela, reivindican, con el nombre de Diaoyu, este pequeño archipiélago administrado por Japón, actualmente.
Desde que Japón comenzó con la compra de tierras privadas en la isla, que supuestamente le pertenecen, las relaciones chino-japonesas son muy tensas y parte del plan de reactivación económica anunciado por Abe se va a destinar a reforzar los medios de las fuerzas armadas.
Tokio quiere destinar más recursos a sus unidades militares, lo que hace que la región entre en un clima de mayor tensión.