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“Cualquier empresa puede operar cumpliendo las normas de seguridad tal y cual sucede en Argentina desde hace algunos años”, afirmó Moreno, en medio del conflicto entre LAN y la autoridad de regulación de los aeropuertos argentinos, Orsna, que le exigió el desalojo de un hangar en el aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires.
El ministro del Interior y Transporte de Argentina, Florencio Randazzo, poco después pidió “reciprocidad” para que Aerolíneas Argentinas pueda operar en el mercado de cabotaje en los países vecinos.
Randazzo, en conferencia de prensa, insistió varias veces en que el Gobierno no se propone expulsar a LAN del país y que la devolución del hangar surge de las obras de modernización que el Estado argentino realiza en la estación aérea metropolitana. El canciller Moreno explicó que, “en el caso de Aerolíneas Argentinas, esta operó en Chile por medio de Aerolíneas del Sur y por razones de negocios dejó de funcionar en 2008 voluntariamente, pero sigue teniendo las puertas abiertas si quisieran entrar a competir”.
Randazzo informó durante una conferencia de prensa que LAN no será desalojado del hangar mañana, viernes, cuando vence el plazo de intimación, ya que existe un amparo otorgado por una jueza de Buenos Aires que habilita su permanencia en el lugar.