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El funcionario agregó que el libre comercio y la cooperación transatlántica para combatir el extremismo y el terrorismo son claves para Berlín.
Steinmeier, que en agosto dijo que Trump era un “Hassprediger” o “predicador del odio”, indicó que algunos miembros del nuevo Gobierno estadounidense entienden la importancia de aliados como Alemania.
“Lo sé, debemos prepararnos para tiempos difíciles, para la impredecibilidad y la incertidumbre” (...) Pero estoy convencido de que encontraremos a auditores atentos en Washington, que saben que incluso grandes países necesitan socios en este mundo”, agregó.
Trump inquietó a los líderes alemanes con comentarios como que Reino Unido no será el último país en salir de la Unión Europea y amenazas de imponer altos aranceles sobre importaciones desde China y México.
La reacción de las autoridades germanas desde que Trump asumió su mandato ha sido mixta.
La canciller Ángela Merkel dijo que buscará compromisos con Trump en temas comerciales y gasto militar, y que trabajará para preservar la importante relación Europa-EE.UU.
El vicecanciller Sigmar Gabriel afirmó que Alemania debería prepararse para un “viaje movido” con el nuevo presidente de Estados Unidos y que Europa tendría que establecer una nueva política económica enfocada en China si Trump aplica medidas proteccionistas.