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La Junta Municipal sesionó en forma extraordinaria a pedido del intendente Albino Ferrer (ANR), que previamente se reunió con representantes de los vendedores, que le solicitaron una ayuda para hacer olla popular. En ese sentido, los concejales aprobaron la entrega de G. 25 millones para el grupo de los vendedores informales (unos 300) e igual suma para los frentistas afectados.
Además, la corporación legislativa resolvió declarar zona de riesgo la calle General Caballero, a fin de evitar que los mesiteros se instalen nuevamente en el lugar. Pero ayer ya estaban “remarcando territorio” que ocuparon durante 25 años.
Los concejales argumentaron que existe peligro de que los edificios de la zona colapsen, atendiendo a que ya se registró desmoronamiento de paredes.
También declararon zona de emergencia distrital, pero sin que esto implique más erogación a la Comuna. Es al solo efecto de que entidades financieras refinancien las deudas de los trabajadores afectados por el incendio.
El director administrativo y de finanzas de la Municipalidad, Maximiliano Ferreira, aclaró a los ediles que el seguro de G. 1.500 millones cubre solo el tinglado del mercado –que está en predio municipal– no así los puestos instalados en la calle General Caballero.
Los concejales liberales responsabilizaron al intendente del incendio por no anticiparse a los hechos. Argumentaron que siempre el mercado fue considerado como una bomba de tiempo. El liberal Freddy Franco dijo que Ferrer hace ocho años es jefe comunal y nada hizo para cambiar las cosas, ni siquiera respondió pedidos de informes de los concejales sobre proyectos a ejecutarse ni de cantidad de puestos que existen.
El edil Nelson Peralta señaló que no se puede echar toda la culpa sobre una persona, y mirando a los vendedores que participaron de la sesión les dijo que ellos nunca quisieron ceder ni un milímetro para que pueda quedar un espacio para salidas de emergencia. Acotó que existen solo algunos pobres en el mercado y que muchos tienen hasta 11 puestos.
Los vendedores señalaron que en realidad no están interesados en el subsidio, porque su objetivo es conservar sus lugares de venta. En tanto vecinos de la zona céntrica se oponen tenazmente a que los informales vuelvan a ocupar la calle y la vereda, por considerar que atentan contra derechos de la población consagrados en la Constitución Nacional sobre el libre tránsito y otros.
Se adelantó que la Junta Municipal estudiará el proyecto de mejora del mercado a ser realizado por la Itaipú Binacional, que prevé dejar en el medio de la calle cuatro metros para permitir la circulación de vehículos y ubicar a los costados las casillas. Es a fin de determinar si tendrá cambios o no.