Villa Hayes se queda sin sus cerros y el daño ambiental es incalculable

Antiguamente la zona del Bajo Chaco, en especial el distrito de Villa Hayes, tenía una profusión de importantes cerros, como el Confuso, Galván y Siete Cabezas, además de otros de menor altura. A raíz de eso hoy se está quedando sin ninguno, según sostuvo el intendente municipal Basilio Núñez (ANR). Lo que más le preocupa es el tremendo daño ambiental, sin resarcimiento.

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VILLA HAYES (Cirilo Ibarra, corresponsal). En nuestro país, en forma constante se hace referencia al ecosistema, al cuidado del ambiente, pero no se exigen tributos por los tremendos daños. A este punto hizo referencia el jefe comunal de esta ciudad y también presidente de la Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal (OPACI), doctor Basilio “Bachi” Núñez.

Resaltó que la Municipalidad “no recibe resarcimiento alguno por los daños incalculables”. Dijo que en su zona había hasta hace poco 7 cerros, “que hoy se están acabando y en sus lugares solo se observan cráteres y aquellos son recursos naturales no renovables, y la comuna de Villa Hayes no percibe ni un peso por los perjuicios”, sostuvo.

Asimismo destacó que, mientras en la Argentina se construyen grandes extensiones de rutas pavimentadas, con piedra paraguaya, “aquí nos estamos quedando sin materia prima para una cuadra de empedrado”, significó. El caso más significativo es el de Villa Hayes que tenía varios cerros en su jurisdicción y que en la actualidad se está quedando sin ninguno de estos recursos por la irracional extracción de piedras.

Aclaró que sabe de la existencia de una disposición legal para el envío de los cargamentos al exterior, “lo que nosotros reclamamos es el resarcimiento”, acotó.

Considera que se necesita mayor fuerza para imponer normas ambientales severas. Reconoce que es difícil, debido al “chantaje” de la pobreza o por la facilidad de las empresas en trasladar la producción al extranjero, en este caso gracias a un acuerdo a nivel de gobiernos.

Dijo que se debe imponer a las empresas exportadoras de minerales o de productos agrícolas contaminantes la obligación de pagar unos impuestos para compensar la degradación del medio natural y los daños a las personas y al ambiente.

Explicó que en una empresa el pasivo es el apartado del balance del ejercicio donde se registra el conjunto de deudas y gravámenes que disminuyen el activo. Usado en términos ambientales, el vocablo se refiere al conjunto de daños realizados o gastos compensatorios que la empresa transfiere a la colectividad.

El doctor Núñez propone la obligatoriedad de una especie de mitigación ambiental en los municipios. Habló también como presidente de la OPACI remarcando que en todo el país “existen grandes fábricas generando enorme polución y no hay resarcimiento para las comunas, que son las que tienen que dar respuesta a la ciudadanía”, concluyó.
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