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Sin embargo, los contratistas de obras licitadas por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) en el Chaco no compran la producción local sino traen todo de Asunción, distante a 500 kilómetros. Por ejemplo, el empresario Bruno Torlotting, propietario de la empresa Beton Bruno, dijo que nunca una vialera capitalina le compró algún caño, aunque está convencido de que sus productos reúnen toda la calidad requerida del MOPC.
Señaló que hace años construye caños con un promedio interior de 100 cm, 50 cm y 30 cm y solo las vende a interesados locales y contratistas de la Gobernación de Boquerón. Indicó que los caños de 100 cm vende por G. 1.100.000 y los de 50 cm son de G. 350.000.
Una postura similar tiene el dueño de La Casa de los Bebederos, de Loma Plata, Levi Siemens. Según él, los caños de cemento producidos en el Chaco Central son “en un 80 por ciento mejores” comparados con los tubos traídos de Asunción, porque se dejan colocar mejor y se desmigajan (fragmentan) menos.
Siemens también señaló que vende caños solo a interesados locales y en un caso un contratista capitalino adjudicada con una obra de la Gobernación de Boquerón mostró interés pero hasta ahora no compró.
Nunca un contratista del MOPC se le acercó para conocer sus tubos, aseguró Siemens. Comentó que intentó en vano vender tubos al contratista Concret Mix SA, que acaba de construir el nuevo asfaltado de la denominada Línea Sur, que une los accesos de los distritos de Loma Plata y Filadelfia, pero que la empresa prefirió adquirir todo de Asunción.
Indicó que produce principalmente tubos redondos y los llamados celulares (tubos cuadrados) para puentes, con medidas de 50x80 cm por G. 900.000, y de 100 x 100 cm por G. 1.600.000. Aseguró que los precios son negociables y si existe interés en otras medidas, no habría problema para fabricar.