SAN ANTONIO (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). El patriota Pablo Díaz prácticamente ya no se levanta de la cama, pero eso no fue impedimento para festejar el martes su siglo de vida en su casa del barrio Centro de esta ciudad. A las 00:00 hubo explosión de petardos que despertó a la población del microcentro de la comunidad y desde el amanecer llegaban vecinos y amigos para saludar al cumpleañero.
El martes, coincidentemente, amaneció muy bien. Al despertar recordó la fecha y que era su cumpleaños, comentaron sus familiares.
Pasado el mediodía, el intendente de la ciudad, Raúl Mendoza (PLRA), llegó a la casa y le entregó un certificado por su centenario y en gratitud por su valentía en defensa de la patria durante la Guerra del Chaco (1932-1935). Alrededor de las 18:00 se ofició una misa de acción de gracias en su honor, y luego sus hijos y nietos le ofrecieron una merienda.
“Solo hay días en que amanece bien y se levanta un rato. Come aún de todo, pero licuado, como locro, poroto, vori vori, pescado y mucha leche. Él es nuestra reliquia viviente, nuestro orgullo”, expresó su hija Felicia Díaz de Machuca.
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Comentó que su padre fue marino y que durante gran parte de la guerra llevaba armas y municiones a los campos de batalla. Relató que se alistó para la defensa del territorio a los 17 años y que gracias a Dios regresó y formó una linda familia con Escolástica Sanabria (+), con quien tuvo cuatro hijos: Gilberto (+), Ángel, Marina y Felicia. En el año 2012 recibió la Cruz del Defensor de las manos del entonces presidente Federico Franco.
Sobrevivientes
Hasta mayo de 2015, el Ministerio de Hacienda registraba poco más de 500 héroes vivientes de la Guerra del Chaco en diferentes puntos de nuestro país. En conmemoración de los 83 años de la Batalla de Boquerón, en una serie de notas, varios de los beneméritos exigieron patriotismo y honestidad a las autoridades y a los ciudadanos. Algunos incluso aseguraron que estaban dispuestos a alistarse nuevamente de ser necesario para defender la nación.