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Sus padres están desesperados, dicen, porque ya no tienen la posibilidad de solventar sus tratamientos. Uno de ellos vive encerrado en una pieza debido a su situación, indicaron.
Los hermanos Fernando (34), Celso (23) y Baldovina (30) sufren de una rara enfermedad psiquiátrica desde hace varios años y reciben la solidaria contribución de los vecinos y amigos, que constantemente acompañan a sus padres para tratar de mantenerles estables, aunque en estos últimos tiempos ha empeorado considerablemente la situación de salud de los mismos, señalaron los familiares.
Instituciones
Los progenitores de los hermanos, Eulalio Duarte y Margarita Larroza, manifestaron su impotencia frente al problema que están atravesando a causa de la enfermedad de sus hijos, debido a lo cual solicitan a las instituciones gubernamentales algún aporte de dinero para solventar los gastos que implica el tratamiento psiquiátrico, según refieren.
En ese sentido, expresaron que en varias oportunidades fueron inscriptos en el programa de ayuda monetaria “Tekoporã”, a través de la Municipalidad, y que es promovido por la Secretaría de Acción Social (SAS), pero que hasta hoy no tienen la posibilidad de percibir un solo guaraní de parte de esa institución ni de otra.
Encerrado
El mayor de los hermanos, Fernando, vive encerrado en una pequeña pieza construida especialmente para poder mantenerlo en el lugar, debido a su comportamiento agresivo, y para evitar cualquier ataque que pueda cometer contra los propios miembros de la familia o contra otras personas, señalaron.
Los demás enfermos, por su parte, se manejan en otros sitios de la vivienda con el cuidado de la madre, atendiendo que el papá debe salir a trabajar para conseguir recursos para la casa y, de esa manera, paliar las necesidades diarias más urgentes.
“Nuestra vida se ha convertido es un verdadero calvario desde que nuestros hijos se enfermaron, y lo más preocupante es que hasta hoy los médicos no encuentran un tratamiento curativo para ellos. Los tres hermanos tuvieron el mismo síntoma cuando tenían entre 15 y 17 años, y desde ese momento estamos padeciendo este problema”, refirió la mujer.
Por último, solicita a la Secretaría de Acción Social y las demás instituciones que le ayuden en el auxilio a sus vástagos.