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Édgar Walko fue intendente de Yuty en el periodo 2005-2010. Al culminar su mandato fue denunciado por un faltante que supera G. 4.000 millones, correspondiente a los ejercicios fiscales 2008, 2009 y 2010. Desde 2013 el proceso está a cargo del fiscal de Delitos Económicos y Anticorrupción Luis Piñánez.
En marzo se realizó el sexto intento de audiencia preliminar para decidir si el caso es o no elevado a juicio oral. El anterior fue en marzo y Walko presentó certificado médico por dengue; en noviembre se enfermó su abogado y el 19 de agosto el fiscal Piñánez tenía un juicio oral.
Además del faltante de más de G. 4.000 millones, Walko está procesado por lesión de confianza y producción de documentos no auténticos. El exjefe comunal habría utilizado documentos falsos para justificar erogaciones por obras inexistentes.
El proceso lleva más de cinco años y todavía no se puede realizar la audiencia a raíz de acciones dilatorias. El abogado Ricardo Duarte, exconcejal municipal colorado durante la administración de Walko, ejerce la defensa.
La dilación del proceso preocupó a los pobladores desde el inicio y aseguran que el objetivo es que el caso se extinga. Denunciaron que ahora un grupo de políticos colorados está presionando para que quede impune.
Según nuestras fuentes, el grupo está integrado por Carlos Barreto Sarubbi, Avelino Dávalos, Celso Troche, el intendente de Yuty, Éver Vera; y Pedro Díaz Verón, jefe comunal de Caazapá y hermano del fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón. Supuestamente, presionan al propio fiscal general para lograr su objetivo.
La primera denuncia contra la gestión de Walko la realizó el entonces intendente Nelson Vera Villar (PLRA). Entonces, el exjefe comunal dijo que los documentos de su administración fueron llevados a la fiscalía para que sean verificados y juzgados como corresponde. “Porque estoy seguro por mi administración es que llevé allí”, dijo.
Según datos, la audiencia preliminar fue fijada para el 19 de mayo, a las 10:00. Ayer intentamos hablar con el fiscal de la causa, Piñánez, para escuchar su versión sobre las denuncias, pero su celular “no estaba disponible”.