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LUQUE (Arnaldo Espínola, corresponsal). La constructora Talavera & Ortellado SA, a cargo del Ing. Alberto Alcaraz, fue adjudicada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) para realizar la canalización y pavimentación de la ruta intermunicipal “Coronel Martínez” por más de G. 41.522 millones. La firma subcontrató a la empresa unipersonal del ingeniero Simeón Pedrozo para dichas tareas, según constató ayer una comitiva de la Municipalidad y la comisión vecinal Kurusu Ñuatî, de la compañía Cañada San Rafael.
Los materiales, como piedras y arenas, sirven como represa y taponan el cauce del desagüe pluvial. Con eso se producen inundaciones en la zona cada vez que se registra una lluvia importante, denunció Julián Mussi, presidente de la comisión vecinal Kurusu Ñuatî.
Luego de las intensas lluvias de los últimos días, partes del precario canal recientemente construido fueron arrastradas por raudales.
A raíz de las quejas de los vecinos, la Junta Municipal, presidida por la concejala Francisca Franco (PLRA), solicitó a la Municipalidad de Luque, como medida de urgencia, suspender las obras, ya que no existe permiso de la Dirección de Obras para ejecutar los trabajos.
Ayer, la comitiva presidida por la titular de la corporación legislativa e intendenta interina, Francisca Franco, realizó un recorrido en la zona de obras y comprobó que se está haciendo una pésima construcción.
La suspensión de las actividades fue comunicada por la dirección de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad local a dueños de la empresa. La firma debe presentar el plano y planillas de obras para continuar con los trabajos.
Los trabajos debieron empezar en diciembre pasado, pero, según la denuncia de los vecinos, hace un mes que los obreros de la empresa del ingeniero Pedrozo iniciaron la construcción de canalización de la ruta.
Culpa a fiscales
El ingeniero Simeón Pedrozo dijo que no tiene “ninguna responsabilidad” en la calidad de la construcción y “recomendó” hablar con los fiscales de obras del MOPC.
“Yo agarré esa obra porque no tenía trabajo. No se gana nada y además que la empresa (la subcontratista Talavera Ortellado) no quiere pagar. Además llueve cada rato y lo que se hizo a la mañana, a la tarde ya se destruye todo con el raudal y no se puede avanzar”, explicó Pedrozo.
A su turno, el director de Vialidad del MOPC, Hugo Miranda, cuando lo llamamos dijo que no tenía conocimiento de la suspensión de las obras y prometió tomar medidas al respecto.
“Vamos a verificar el trabajo y tomaremos medidas para evitar que los vecinos sigan padeciendo por la mala calidad de la construcción”, indicó.