Suspenden a siete ediles de Curuguaty

La crisis en la Junta Municipal de Curuguaty se agravó. La “destituida” presidenta, Wilma Meza (PLRA), ahora pidió cesar en sus funciones a los siete ediles que impulsaron su reemplazo por la edil Mirna Benítez (ANR).

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CURUGUATY (Pablo Medina, corresponsal). La edila Wilma Meza (PLRA) firmó la resolución N° 1/2012 por la que cesa en sus funciones a los ediles liberales Eliodoro Ruiz (16 ausencias), Román Marín (13), Miguel Torres (8), Antonio Giménez (16), y los colorados Alberto Fernández (12) y Mirna Benítez 14), por incumplimiento de la resolución 206/2010 para el funcionamiento de la Junta Municipal en esta ciudad. La normativa establece que “los concejales que faltaren a las sesiones tres veces consecutivas y cinco alternadas en un año sin la debida justificación serán considerados cesantes y reemplazados por el miembro suplente correspondiente”.

Ante esta situación, la titular Wilma Meza, pese a haber sido “destituida por la mayoría”, resolvió cesar a los siete ediles –todos aliados al intendente municipal, Ramón Vega Barreto (PLRA)– y autorizó a la secretaria de la corporación comunal a llamar a los ediles suplentes para reemplazarlos en la sesión prevista para el próximo viernes.

La dirigente liberal sostiene que “su periodo de mandato dura un año (vence el 21 de diciembre) y solo podrá ser removida por mayoría absoluta de 2/3 del total de sus miembros”.

La edil Mirna Benítez (ANR) sostuvo que le corresponde asumir la presidencia de la Junta ante la ineptitud de Meza, pero en su condición de vicepresidenta. “No es cierto que no hubo quórum en la última sesión, los cinco payasos se retiraron voluntariamente de la sala, y la mayoría comenzó a deliberar desde las 09:15 como rige el reglamento, la elección de nueva Junta se ajusta estrictamente”, aseveró.

Reunión caldeada

El viernes pasado, la sesión se realizó en un ambiente bastante acalorado, que ni el aire acondicionado pudo regular, pues la edil Mirna Benítez intentó arrebatar la silla a su colega Wilma Meza, al igual que el libro de actas de la Junta Municipal. El grupo de la mayoría pretendía utilizar el libro para legalizar la sesión, pero realizarlo en otro lugar. A pedido de la minoría, el libro fue entregado a la escribana pública Amada Gutiérrez, hasta la próxima sesión ordinaria.

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