Supuestos campesinos atacan a tiros una estancia

Un grupo de “sintierras” disparó armas de fuego contra el casco principal de la estancia “Panambí”, perteneciente a la familia De Gásperi y ubicada en la localidad de Tapiracuãi Poty de Capiibary. El ataque se produjo en la madrugada de ayer y no ocasionó víctimas, se informó.

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CAPIIBARY departamento de San Pedro (Alberto Núñez, corresponsal). El caso fue comunicado a agentes de la comisaría 17ª de Capiibary, cuyo jefe el comisario principal Marcos Martínez sugirió a los empleados a que se escondan y no respondan las provocaciones de los “sintierras” y de esa manera evitar que todo termine como lo que había ocurrido a inicios del mes en la estancia “Pindó” en el departamento de Canindeyú, donde fueron quemadas varias casas de los empleados, un depósito y una camioneta.

Cuatro días antes la estancia Panambí fue invadida por un grupo de labriegos presuntamente liderados por José Villalba y Pánfilo Martínez, ambos con medidas sustitutivas a la prisión, según los datos.

El encargado del establecimiento, Andrés Moreno, confirmó que ayer de madrugada, el grupo de campesinos rodeó prácticamente el casco principal y abrieron fuego, pero los empleados no respondieron los disparos.

Hasta el cierre de esta edición nadie pudo verificar minuciosamente el predio de la estancia, que la semana pasada fue invadida por los labriegos, según la denuncia presentada en la comisaría local y al Ministerio Público, pero aún no pudieron ser individualizadas las personas que integran el grupo.

Los agentes policiales, en una cantidad no mayor a 5 uniformados, no pueden ingresar al sitio debido a que los hombres armados les superan ampliamente en cantidad.

Moreno, al ser consultado si contaban con alguna medida de seguridad por parte de la Policía Nacional, respondió que ni un policía les acompaña en la estancia, en donde el hostigamiento es constante por parte del mencionado grupo que en varias ocasiones ha tomado a policías como rehenes y saqueado varios retiros en el marco de su intención de apoderarse de una parte de las tierras, pero siempre utilizando la violencia, según las denuncias.

Se atribuye a la Organización de Lucha por la Tierra (OLT) el ataque hecho a la estancia “Pindó”.

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