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GRAL. FRANCISCO RESQUIN, San Pedro (Omar Acosta, corresponsal). El intendente de esta localidad, Eugenio Rodas (PLRA), lamentó que la institución haya tardado tanto en atender el caso, ya que según explicó había enviado notas y llamó en reiteradas ocasiones a la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat), preocupado por el abandono de las obras, pero que no recibió respuesta oportuna. Explicó que el inmueble le pertenece a la Municipalidad, y que las casas aún no habían sido adjudicadas, por lo que ahora queda en manos de la secretaría de Estado resolver el caso.
La Senavitat envió un correo electrónico a esta corresponsalía, en el que expresa que se encuentra coordinando con la Comuna los procesos y las medidas pertinentes ante el supuesto hecho punible de invasión de inmueble ajeno, según la doctora Lorena Balbuena, asesora jurídica de la institución.
“Se realizó la comunicación y la denuncia correspondiente a fin de que se impulse el proceso y se tomen medidas pertinentes ante la afectación del bien jurídico. Se han tomado decisiones conjuntas entre la asesoría jurídica de la institución y la asesoría jurídica de dicho municipio”, reza parte del escrito.
Denuncia ante fiscalía
El fiscal de Santa Rosa del Aguaray, Carlomagno Segundo Alvarenga, explicó que la Senavitat denunció el hecho ante la Fiscalía General, y que de allí se remitió a su unidad las documentaciones. Adelantó que el Ministerio Público envió un oficio a la Policía Nacional para que individualice a los ocupantes a fin de cumplir con el protocolo establecido.
Una vez cumplido este proceso, se procederá a la aprehensión en flagrancia (desalojo) en caso de que los invasores no se retiren antes.
Los presuntos sintechos, liderados por Nilda Pérez, ingresaron en la primera semana de diciembre pasado al complejo habitacional abandonado e inconcluso. La obra estaba a cargo de la constructora de Hugo D. Patiño.
“Ya comenzamos a limpiar y trataremos de terminar la construcción”, había manifestado Pérez, además de advertir que no saldrían del lugar porque necesitan vivienda. Si la Senavitat quiere terminar las obras, los ocupantes van a cooperar con la condición de quedarse como propietarios de las casas, indicó.