San Antonio refleja abandono y los ciudadanos se quejan de Comuna

La ciudad de San Antonio, cuya Municipalidad es administrada por Raúl Isaac Mendoza Ramos (PLRA), imputado por la supuesta mala utilización de los recursos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) está en total estado de abandono. Baches, aguas servidas y basurales se observan en los barrios.

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SAN ANTONIO, departamento Central (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). Las calles y avenidas de la ciudad se encuentran minadas de enormes baches. Los ciudadanos se quejan de la inacción de la administración comunal, a cargo del intendente Raúl Isaac Mendoza Ramos (PLRA), para solucionar los problemas pese a los reiterados y desesperados reclamos de los automovilistas y habitantes.

En la calle Cadete de Boquerón, que une con Acceso Sur, se observan enormes pozos que representan un peligro para automovilistas y transeúntes. Al no contar con banquina los buses tienen que parar sobre la calzada para alzar y bajar sus pasajeros.

La avenida Américo Ferreira y la calle Terport, también conectadas al Acceso Sur, igualmente están llenas de baches desde ya hace más de un año. Pese a los reclamos de lugareños y de la Junta Municipal no son reparadas.

Por otro lado, los choferes de ómnibus ya no quieren ingresar al barrio San Jorge porque el asfaltado de la calle Ykuaka’aguy prácticamente ya desapareció.

Mendoza está cumpliendo el segundo periodo de mandato consecutivo. Según las denuncias, desde que inició gobierno 2015-2020 no invirtió en la reparación de las calles, pese a que recibe millonarios desembolsos de royalties, que deben ser invertidos en infraestructura, principalmente vialidad.

Igualmente, los puentes ubicados sobre el arroyo Guasu están en estado calamitoso y en los días de lluvias grandes quedan clausurados. La estructura debe ser reparada con urgencia.

Los pobladores también se quejan de que debido al pésimo servicio de recolección de basuras las calles, arroyos, baldíos y sitios públicos se llenan de desperdicios.

Mientras la ciudad proyecta una lamentable dejadez, el intendente encara la construcción de un centro cultural por más de G. 4.000 millones. La obra comenzó pese a la oposición de ciudadanos.

En varias ocasiones intentamos hablar con el intendente Mendoza de la situación de la ciudad, pero no pudimos porque las veces que acudimos a la Municipalidad no se encontraba y tampoco contestó nuestras llamadas a su celular. Estamos abiertos a escuchar su versión.

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